Integrar la naturaleza con la tecnología para reforzar la adaptación al clima

La Comisión Europea publicó el 24 de febrero de 2021 la nueva Estrategia de Adaptación al Clima de la UE. Durante la presentación de la estrategia, el Vicepresidente Ejecutivo del Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans, destacó la necesidad de hacer una adaptación más inteligente utilizando datos, así como más sistémica centrándose en las comunidades locales y los ecosistemas, y aprovechando las soluciones basadas en la naturaleza.

Según la Estrategia de Adaptación al Clima de la UE “El cambio climático está ocurriendo hoy, así que tenemos que construir un mañana más resiliente. El mundo acaba de concluir la década más calurosa de la que se tiene constancia, durante la cual se ha batido ocho veces el récord del año más caluroso. Las personas, el planeta y la prosperidad son vulnerables al cambio climático, por lo que tenemos que prevenir lo que no se puede adaptar y adaptarnos a lo que no se puede prevenir. Y debemos hacerlo más rápido, y de forma más inteligente y sistémica”.

Una de las formas de enfocar la adaptación al clima de forma sistémica, según la estrategia y según Timmermans, es utilizar las soluciones basadas en la naturaleza: “Promoveremos las soluciones basadas en la naturaleza en la medida de lo posible”, señaló. “Ayudan a la adaptación y al mismo tiempo a la biodiversidad”.

Según la Estrategia de Adaptación al Clima de la UE “La aplicación de soluciones basadas en la naturaleza a mayor escala aumentaría la resiliencia climática y contribuiría a múltiples objetivos del Pacto Verde Europeo. Por ejemplo, la protección y restauración de humedales, turberas y ecosistemas costeros y marinos; el desarrollo de espacios verdes urbanos y la instalación de tejados y muros verdes; la promoción y gestión sostenible de bosques y tierras de cultivo contribuirán a la adaptación al cambio climático de forma rentable.”

Las innovaciones tecnológicas crean sinergias con las soluciones basadas en la naturaleza

Dado el carácter urgente, generalizado y sistémico del cambio climático, las innovaciones tecnológicas pueden utilizarse en sinergia con las soluciones basadas en la naturaleza para adaptarse mejor a sus efectos.

“Al igual que la tecnología permite ser ágil, también puede ayudar”, señala Daniel Zimmer, Director de Uso Sostenible de la Territorio en EIT Climate-KIC. “Por ejemplo, la agricultura y la silvicultura pueden beneficiarse de sensores innovadores y de una mejor vigilancia para desarrollar nuevas estrategias de control de plagas. Y la nueva maquinaria de precisión para el labrado puede utilizarse para reducir la pérdida de carbono del suelo”.

La EIT Climate-KIC ha desarrollado un conjunto de iniciativas con impacto sistémico que utilizan soluciones basadas en la naturaleza y/o innovaciones tecnológicas, como la ecologización urbana a nivel granular, la normalización del etiquetado de resiliencia climática para las propiedades, la ampliación de la producción de alimentos sostenibles y la reducción de las emisiones a través de dietas basadas en plantas. Más información sobre estas actividades aquí.

La biodiversidad abordada de forma sistémica es crucial para la adaptación

“La naturaleza es, al mismo tiempo, un elemento afectado por el cambio climático y un instrumento que hay que utilizar”, indica Zimmer. “Para crear resiliencia, hay que hacerse muy fuerte, construyendo un dique por ejemplo, o volverse más ágil y adaptable”.

Apoyar la biodiversidad a través de las NbS, como la conservación de los bosques antiguos y la reforestación, es una forma de ser adaptativo porque hace más probable que algunas especies del ecosistema se adapten mejor a las nuevas condiciones climáticas o a las amenazas asociadas a estas condiciones. Por ejemplo, se espera que los bosques estén sometidos a un aumento de las enfermedades y las invasiones de plagas debido al cambio climático. Tener una biodiversidad representada en grupos como los polinizadores (por ejemplo, insectos, murciélagos y pájaros) y los organismos dispersores de semillas (por ejemplo, pájaros y mamíferos), favorece, por ejemplo, la proliferación de diversas especies de plantas y árboles, lo que aumenta la resiliencia de un bosque ante esas amenazas. Un bosque que atrae y alberga más variedad de especies será mucho menos vulnerable que una plantación de árboles.

La Demostración Profunda de Paisajes como Sumideros de Carbono del EIT Climate-KIC trabaja actualmente en Escocia y en Châlons-en-Champagne en Francia para estudiar el uso del suelo de forma sistémica y hacer que los ecosistemas pasen de ser fuentes de carbono a sumideros. Está fomentando soluciones basadas en la naturaleza como la conservación de bosques, turberas y humedales, la plantación de árboles y la regeneración del suelo, que también fomentan la biodiversidad. En una entrevista con Zimmer se explica más sobre este trabajo.

El secuestro de carbono en el suelo, mejorado por la tecnología para acelerar la adaptación

El secuestro de carbono en el suelo, mejorado por la tecnología para acelerar la adaptación
Otra solución basada en la naturaleza es el secuestro de carbono en el suelo (SCS), un proceso en el que el carbono atmosférico se almacena estratégicamente en el suelo aumentando su materia orgánica, lo que a su vez conlleva una mayor capacidad de retención de agua y fertilidad. Estas propiedades permiten a los cultivos adaptarse más fácilmente a las condiciones de sequía provocadas por el cambio climático. El SCS se lleva a cabo a través de una variedad de métodos y a menudo se dirige a la regeneración de las tierras agrícolas. Algunos ejemplos son: La reforestación o la restauración de praderas, la reducción del arado, la adición de enmiendas orgánicas como el compost y el estiércol, el uso de cultivos de cobertura como el trébol, la creación de humedales y estanques, y el riego de pastos o praderas.

El proyecto Carbon Farming de EIT Climate-KIC utiliza un enfoque sistémico para aumentar el SCS, teniendo en cuenta también las necesidades de múltiples partes interesadas y socios, así como el contexto local. Como ejemplo de Soluciones basadas en la Naturaleza, el proyecto incentiva a los agricultores para que apliquen cultivos de cobertura, como el trébol, que se cultivan principalmente para beneficiar al suelo. En concreto, los cultivos de cobertura pueden suprimir las malas hierbas, reducir la erosión del suelo, mejorar la fertilidad y la calidad del mismo, evitar enfermedades y plagas y promover la biodiversidad. El proyecto Carbon Farming también está integrando las Soluciones basadas en la Naturalezay la tecnología de una manera fascinante, utilizando satélites para supervisar la salud de los cultivos, lo que se traduce en una mayor precisión para el ahorro de costes y la escalabilidad y, en última instancia, la mitigación del cambio climático y la adaptación. El proyecto Carbon Farming tiene actualmente proyectos piloto en Francia y Suiza.

Soluciones basadas en la naturaleza de vital importancia para la adaptación de las ciudades

Soluciones basadas en la naturaleza de vital importancia para la adaptación de las ciudades
Adoptando un enfoque más urbano de la solución basada en la naturaleza, la ganadora de la “idea más avanzada” en los premios globales EIT Climate-KIC Climathon 2020, Start Park, pretende rediseñar los parques para que se conviertan en elementos clave de la estrategia de adaptación de la ciudad de Florencia. En concreto, su concepto es una zona verde urbana cuyas infraestructuras y servicios se dedican a la reutilización y el drenaje del agua, y se complementa con actividades de sensibilización sobre el clima en la comunidad local. El equipo está desarrollando ahora un conjunto de herramientas para que otras ciudades de Europa puedan replicar el prototipo de Start Park y medir su impacto.

En el folleto de estudios de caso “Innovaciones en el uso de la tierra” se pueden encontrar más ejemplos del trabajo del EIT Climate-KIC sobre la integración de las Soluciones basadas en la Naturaleza y las soluciones tecnológicas de forma innovadora para la mitigación y adaptación al cambio climático.