Entrevista con expertos en innovación de políticas y gobernanza en las universidades de Madrid y del País Vasco
In The News
13 Feb 2020
¿Cuál es el panorama actual de la innovación en las políticas públicas y la gobernanza en el sur de Europa? ¿Qué instituciones están trabajando en nuevas formas de gobernanza para hacer frente al cambio climático? ¿Qué están haciendo y qué agentes están involucrados?
Estas son algunas de las preguntas que, en los últimos meses, un equipo interdisciplinario formado por Gorka Espiau Idoiaga, Fernando Fernández-Monge, Carlos Mataix, Karmele Olabarrieta y Cecilia López Pablos ha intentado responder.
¿Quiénes sois?
Algunos de nosotros somos académicos, mientras que otros son profesionales con antecedentes muy diferentes: derecho, política, ingeniería y comunicaciones. Trabajamos para el Centro de Innovación y Tecnología para el Desarrollo itdUPM de la Universidad Politécnica de Madrid y para Agirre Lehendakaria Center (ALC) un centro de estudios interdisciplinares en el marco de las Ciencias Sociales, vinculado a la Universidad del País Vasco UPV/EHU.
¿En qué estáis trabajando con EIT Climate-KIC?
Básicamente hemos realizado una exploración de los conceptos y experiencias en torno a esta idea emergente llamada “innovación en políticas y gobernanza”, añadiendo la experiencia de los centros de investigación-acción que contribuyen a la transformación sostenible. Algunos de nosotros también estamos involucrados en el Programa de Demostraciones Profundas de Cambio en Madrid y en el Valle de Mondragón. Esto nos ha ayudado a enmarcar y enfocar la investigación de una manera que esperamos sea útil para otros compañeros y socios de EIT Climate-KIC.
¿Por qué es importante esta investigación para la innovación climática?
El cambio climático es un problema realmente complejo de abordar. Podemos incluso llamarlo un problema perverso; tal vez el problema más perverso de nuestro tiempo, dado que nuestra supervivencia como especie depende de si somos capaces de resolverlo más pronto que tarde. Sin embargo, las estructuras de gobernanza y los mecanismos de diseño de políticas existentes son ineficaces para hacer frente a este tipo de desafío arraigado en la sociedad.
En este trabajo de investigación, examinamos algunas de las innovaciones y cambios – tanto explorados por los académicos como puestos en práctica por los gobiernos – de tales estructuras y mecanismos que pueden ayudarnos a hacer frente al cambio climático.
Pensamos que es importante condensar estas prácticas emergentes porque para hacer frente al cambio climático será necesario transformar nuestras instituciones. Es de esperar que las personas que se enfrentan a la dura tarea de innovar en la gobernanza y la política puedan encontrar alguna inspiración en esta labor.
¿Qué fue lo más interesante o sorprendente que descubrieron en el proceso del proyecto?
Tal vez lo más interesante es la comprensión de que la puesta en práctica del tipo de cambio sistémico necesario para hacer frente al cambio climático requiere necesariamente transformaciones en los aspectos culturales, las creencias y los sistemas de valores.
Las innovaciones más interesantes que encontramos fueron las que combinan soluciones tecnológicas con nuevas formas de relacionarse con los ciudadanos. Esto va más allá de la simple promulgación de mecanismos participativos, y exige una exploración de las narrativas y metanarrativas que operan en una comunidad en torno a sus necesidades y aspiraciones reales. La dimensión de escucha y participación es esencial para iniciar cualquier proceso de transformación, y es clave para construir narrativas de transformación compartidas.
Sin embargo, a pesar de su centralidad, es algo sorprendente darse cuenta del difícil momento que tienen las instituciones públicas para establecer mecanismos que permitan atender regularmente a las diversas necesidades sociales. A menudo utilizan ciertos instrumentos (consulta, presupuesto participativo) para iniciativas específicas o partes relativamente pequeñas de sus presupuestos, pero es difícil encontrar mecanismos implantados a nivel sistémico.
¿Hay algo que os haya inspirado especialmente en la lucha contra el cambio climático?
Definitivamente hay esperanza. Cuando comenzamos esta investigación, rápidamente nos dimos cuenta de que hay un gran número de “experimentos” y personas que buscan nuevas formas de hacer las cosas desde perspectivas y disciplinas muy diferentes en el sur de Europa, lo que en sí mismo es una gran noticia.
Además, ha sido particularmente inspirador compartir nuestros conocimientos en un seminario web con compañeros de la Comunidad EIT Climate-KIC y ver la sabiduría colectiva y, quizás lo más importante, la motivación, que existe. Este es probablemente nuestro mejor activo y arma para enfrentar el cambio climático, por lo que deberíamos estar buscando aprovechar cualquier posibilidad de permitir el aprendizaje entre iguales entre los profesionales que están experimentando con los casos como los que hemos elegido. Tenemos que ayudar a estas personas comprometidas a romper los silos de las instituciones en las que trabajan diariamente y apoyarse mutuamente para seguir aprendiendo y superar las barreras.
Sobre la base de la investigación, ¿qué debe suceder ahora en la lucha contra el cambio climático?
Tiene que haber un amplio consenso de que las soluciones tecnológicas por sí solas no nos llevarán allí. Los gobiernos tienen que ser los principales facilitadores de este cambio, y para ello es necesario cambiar primero sus propias estructuras y capacidades.
Si aprovechamos la sabiduría colectiva de todas las experiencias que están ocurriendo actualmente de manera dispersa, definitivamente podremos lograrlo.
Echa un vistazo al proyecto de investigación “Innovación en materia de políticas y gobernanza”: Definiciones y ejemplos en el espacio climático’ aquí.