Una oportunidad para el cambio sistémico
In The News
16 Mar 2020
En muy pocos días el paradigma ha cambiado por completo. Desde la aparición del Covid-19 a finales de diciembre del pasado año en China, los hechos se han desencadenado a tal velocidad que pensábamos mirar el problema desde la barrera, sin darnos cuenta de que nos habíamos convertido en el epicentro de esta pandemia en el mundo, según declaró la OMS la semana pasada. La situación no tiene precedentes y países como Italia y España han tenido que confinar a sus ciudadanos para frenar la expansión de la pandemia con el ejército y todas las fuerzas de seguridad del estado capacitadas para el obligado cumplimiento de no salir de nuestros hogares a no ser que sea estrictamente necesario. El resto de los países europeos ya empiezan a tomar medidas drásticas en este sentido para poder frenar la expansión imparable de un virus que está paralizando el planeta.
Las consecuencias económicas de este parón son incalculables y los gobiernos están diseñando a contrarreloj los planes económicos de contención para paliar los efectos de una recesión económica inminente.
Pero tenemos que seguir adelante. Tenemos que ver esta situación como una oportunidad. Todos los centros docentes del país están cerrados por lo que se debe propiciar las clases online para no paralizar del todo la actividad lectiva de una generación de jóvenes que tiene que velar por su futuro. Tenemos que ver una nueva oportunidad en esta situación y desarrollar un sistema educativo más sostenible.
Durante la vigencia del Estado de Alarma decretado en España sólo las tiendas de alimentación y de primera necesidad están abiertas. Los movimientos se han limitado a lo estrictamente necesario. La circulación de personas por las vías de uso público se reduce a la adquisición de alimentos, productos farmacéuticos y de primera necesidad o para ir a trabajar, con algunas excepciones. Con esta limitación de movimiento será evidente la reducción drástica de la polución. El aire permanecerá más limpio de forma inevitable.
Siguiendo la estela de lo que está aconteciendo en Italia desde hace ya más de una semana, la comunicación online ha experimentado una explosión. La limitación de movimientos hasta para reunirnos con familiares y amigos está produciendo que el uso de sistemas de comunicación telemática se dispare. Somos seres sociales y necesitamos mantener el contacto con nuestros iguales. Otros sectores también han visto una nueva oportunidad. El mundo del entretenimiento y la cultura ha invadido las redes sociales: músicos, artistas, presentadores de televisión, personas influyentes y museos están virtualmente abiertos a un público más grande que nunca.
En EIT Climate-KIC ya se determinó el teletrabajo desde la semana pasada como medida preventiva ante el incremento de las cifras en Europa. Si bien es cierto que EIT Climate-KIC posee las herramientas y tecnologías para trabajar de manera inteligente, manejar reuniones en línea y colaborar a través de canales digitales, esto será una nueva oportunidad para realizar un gran experimento estratégico para probar nuevas formas de trabajo a la vez que seguimos reduciendo nuestra huella de carbono.
Además, contamos con una Plataforma de Aprendizaje Online, que opera 7/24 y es gratuita está viendo una gran aceptación en el uso.
Como organización de aprendizaje, EIT Climate-KIC aprovechará esta oportunidad para repensar el negocio como de costumbre. Es una oportunidad que tienen para profundizar su forma de tratar con las reuniones a distancia y mejorar su capacidad para trabajar juntos y apoyar a la comunidad, mientras reducen drásticamente las emisiones de carbono. Después de esta crisis el equipo no será el mismo, definitivamente será mejor.
La gente probablemente está aprendiendo que no están completamente equipados para luchar contra la pandemia del coronavirus… o el cambio climático. Pero incluso si el Covid-19 y el clima tienen que comportarse de manera diferente, ambos requieren enormes compensaciones económicas, cambios de comportamiento, acciones valientes como poner la justicia social en el centro y cuidar a los vulnerables, lo que llamamos transformación sistémica, sistémica porque muchas partes necesitan cambiar no sólo unas pocas.
¿Serían el cambio climático, la economía circular y la innovación un sueño lejano? ¿O podría el sector público, que ahora está luchando agresivamente contra el virus, replantearse su papel “para asegurar aún más un crecimiento más orientado a la innovación, inclusivo y sostenible”, como afirma la profesora Mariana Mazzucato?
¿Hay una lección que aprender? EIT Climate-KIC está colaborando con varias de las juntas de las misiones de la UE para crear ciudades, economías, paisajes del futuro, lo cual fue inspirado por la profesora Mazzucato y su concepto de “misiones” de innovación de gran impacto y ambición para abordar los enormes desafíos de transformación a los que nos enfrentamos. EIT Climate-KIC está trabajando con su cambio de paradigma en la economía (“cambiar la dirección del crecimiento”), ya que ha optado por posicionarse como un ecosistema de innovación orquestado que conecta la “demanda” y la “oferta” para catalizar el cambio sistémico transformador y reúne a los actores públicos y privados: empresas y estados, individuos y ciudades.
Desde EIT Climate-KIC, profundamente comprometidos con las cuestiones climáticas y ambientales, hemos estado tratando durante años de cambiar el comportamiento y ahora que esto se presenta, es una oportunidad enorme para que cambiemos la norma, no temporalmente sino, esperemos, para siempre. En nuestra estrategia ‘Transformation, in time’ EIT Climate-KIC afirma que continuar trabajando a través de cambios graduales e incrementales no será suficiente. Lo que se necesita ahora es una transformación fundamental de los sistemas económicos, sociales y financieros que desencadene un cambio exponencial en las tasas de descarbonización y fortalezca la resistencia climática.
¿Podría ser el Covid-19 uno de los desencadenantes que estamos buscando?
EIT Climate-KIC está manteniendo a su comunidad lo más protegida posible, contribuyendo a frenar la propagación del virus. Pero continúa con sus actividades e iniciativas cruciales para combatir el cambio climático.
Tenemos la oportunidad de innovar en la búsqueda de un futuro sostenible mientras luchamos contra el coronavirus. Así que nunca desperdicies una buena crisis. Resolvámosla y hagámoslo de forma ecológica.